Se recomienda que aparte de profesionales de la psicología clínica, el Ayuntamiento potencie terapias con perspectiva social, cultural, de género y de clase. La salud mental y emocional está relacionada con las violencias estructurales.
Estas terapias deberían ser del tipo:
Terapias en grupo. Agrupación por tipos de vivencias personales y de las necesidades (inmigración, LGTBI+, mujeres...)
Potenciar el formato peer to peer.
El/la profesional que guía al grupo debe tener información en interseccionalidad y violencias estructurales. También, tendrán que ser personas con las que el grupo se sienta identificado teniendo en cuenta sus necesidades y diversidades. (Peer to Peer)
Posibilidad del acompañamiento familiar en caso de ser necesario.
Espacio para crear acciones abiertas en el barrio para sensibilizar sobre este tipo de violencias (siempre de forma voluntaria por parte del grupo).
Se propone que se ofrezcan estos servicios en un equipamiento público en cada barrio, como mínimo. Algunos de estos equipamientos pueden ser: centros cívicos, espacios jóvenes, bibliotecas, salas jóvenes, casal de barrio…
El impacto será relevante a corto plazo por la mejora de la accesibilidad de la información a los jóvenes y, por tanto, en la mejora de su salud mental.
Atienden que la propuesta que se plantea va muy enfocada a personas muy consciente de su malestar y se encuentra en busca de un espacio donde solucionarlo. Vemos necesario que exista un proyecto enfocado a la prevención y detección de situaciones problemáticas de salud mental a través del ocio enfocado a un público más amplio. Consideramos que puede ser complementaria a la propuesta “Do more of what makes you happy”, puesto que tienen objetivos diferentes.
Aceptación de la asamblea: 82,86%
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